domingo, diciembre 31, 2006

Ecos de fin del 2006


A los dos días de aterrizar acudí allí pero ya no estaba. Entonces me dí cuenta de que aquella visita se había convertido en un rito, un rito que ya no iba a volver a realizar. No lo sabía hasta que faltó. Me pongo a caminar, puedo girar aquí o allá, buscando.

Guiño dubitativo, te hablo y no sé, lo había preparado y me puede tu inercia, tu presencia me impide.
Mejilla, anatomía del aliento, seda interminable de la que tiro, saliva.
Un acordeón al fondo me despertó de ese rancio contemplar que es bucear en los recuerdos.
Evito revisar esas fotos en las que están las ausencias, los filos cristales y el metal aspero.
Encuentros de ojos abiertos, de estar cerca, de beso. De miradas y voces, de música para dejar de hablar. Hay presencias que llegan. Di porqué me voy y porqué siempre nos encuentran con el paladar empapado en ginebra.
Hielos derretidos, cristal frío. Cerca de ti.

miércoles, diciembre 06, 2006

Ecos de entre noviembre y diciembre

Nada quedó sin humedecer excepto tus labios.

Hojas pisadas, selladas al asfalto para siempre.
Mientras la mañana es más agua fría que escarcha.
Humo de la chimenea que dibuja una barriga para no ascender.
Árboles enfrentados en una pelea infinita de golpes, ramas contra rama, sangre, fractura, al fondo.
Suelo desnudo, sin piel, me hundo en tus carnes y escucho quejidos.
Te cubres pudoroso con un mosaico de hojas y espejos de charcos.
Delante ríos con prisa. Ese ruido es el mar que baja del cielo para perseguirlos.
Fruta olvidada, condenada, los otros a tu alrededor callaron porque se fueron.

Y entre ese gris entre yo y lo que veo, un verde de esperanza que crece ahí abajo.
El viejo lo fue a buscar bajo el paraguas con la guadaña, lo esperaba.
Y un racimo de bolitas rojas, acuarelas, y una flor blanca y un fruto verde...

lunes, noviembre 27, 2006

Me sorprendo

Cada vez que viajo en avión me sorprendo localizando destinos en el mapa del mundo, los de las últimas hojas de sus revistas.
Después de tantos años y pese a haber pisado algunos de esos lugares me sigue excitando ese estar tan cerca y tan lejos.

miércoles, noviembre 15, 2006

El barco era de piratas

Porque cuando miras al horizonte no ves lo que otros ven. Porque eres capaz de borrar todo lo real, que te persigue y te muestran. No contestas a sus llamadas ni te interesas por sus neones. Lo borras y lo callas, hasta sus olores. Sólo piensas en volver a salir corriendo con el brazo en alto. Cuando está todo borrado entonces dibujas realidades.

Recuerdo entre los tragos de la mente, entre el verde y la Luz cuando yo corría por tus praderas y surcaba tus mares, al otro lado de la frontera. Les llamaba y no me seguían. No veían. No entendía.

Siento tu sombra proyectada desde un lugar que debería encontrarse lejos, perdido. Has roto las distancias y las barreras. Revivo. Te apresuras en abrir todas las cajas de tu mundo. A todas las piezas las bautizas con un nuevo sentido.

Recuerdame que no te olvido, y que no puedo olvidar. Todo se cura y cobra sentido cuando levanto los ojos mirando a un mundo sin razón, dónde sólo te veo a ti con ansias de navegar. En busca de una batalla, de un encuentro, de un nuevo tropiezo aunque fuera mortal.

Dame un minuto, tan solo un instante, sólo un estar despierto y no estar.
Compartir, mantener, no perder. Unirme y huir. Así, dejeme acompañarte.

domingo, noviembre 12, 2006

Descubriendo


Fijas la mirada en mí, sin decir más, sin hablar nada. Ojos abiertos, pupilas medias. Me acerco para dibujar todos los rasgos de tu cara con la yema de mi dedo, en un lenguaje lento y olvidado, con nuestros cuerpos en paralelo. Un beso tímido de labio seco. En un momento te ilumina una sonrisa perdida. Más silencio, presencia que muta, piel fina y tu pelo. Me sigues, te descubro.

Boca abierta, emoción y palpitos. Cuando las sonrisas se convierten en lágrimas y no se enumeran razones. Miel en tu boca. Recupero una canción perdida. Encuentro tu cuerpo ágil. Terminarás dormida por la emoción. Te descubro por el retrovisor.

Corres hasta el límite con el centro de gravedad de tu universo avanzado, en el aire. Despegas del suelo entre carcajadas. Cómo me atraparías. Volverás si tropiezas. logro. Me descubro vulnerable por causa de ti.

Descubriendo mundos cargados de sonrisas. Cuando los tropiezos y el cansancio se vuelven sorbo de vino seco.

lunes, octubre 30, 2006

Bocados


Mar relegado, profundo y frío. Bajo un día de sol perdido. Con las heridas curadas.

Cadencia risueña. Me deslizo sobre ti en cada paso, comprimo mi cuerpo para hundir el tuyo y tu me recoges para impulsarme hacia el cielo. A tu ritmo. Vuelvo a apretar tus carnes en cada punto de encuentro. Lubrica el sudor y el deseo. Espuma. No podemos cerrar la boca. Un quiebro y un momento, mirada perdida sobre tu capricho. Para volver a buscarnos y encontrarnos desprevenidos. Sorpresa, risa hacia el infinito. Cabeza caída, manos llenas. Acelera. No va más.

Quedan nuestros cuerpos compuestos, sobre un manto verde, golpeados por el viento. Ansiosos de ducha fría.
Me queda el saber que tus momentos permanecerán.

jueves, octubre 26, 2006

Vosotras dos


La miras como si ya sólo existierais tú y ella. En cada mañana, cuando está y cuando la recuerdas. Es. Te conozco ya desde hace tantos años.
Por un momento te descubro deslumbrada por su sonrisa. Tu cara refleja luz, una luz que ya había olvidado. Espalda partida. Hemos corrido tantos momentos, tanta lluvia.
La esperas en cada esquina, en cada llamada, la confundes entre la multitud una y otra vez, sin escarmiento. En cada día, en cualquier sonido encuentras esperanzas. Cómo cuando sólo estaba yo. En el alto de la montaña.
Te estremece, agitas tu cuerpo, emocionas tus ojos. Vuelves a mirar al cielo. Noto la energía de vida que desprendes. Suspiro admitiéndolo. Desde la silla, sentado.
Te levantas por ella, vas, corres, ya sin cansancio, todo es motor y paz. No encuentras ya razones para la preocupación ni para mirar atrás. Te veo tan lejos, allá, tan camelia y rosa. Tan blanco transparente, tan dulce sol de la mañana. Que sólo te envidio. Que me entran deseos de ir, de ir hacia ti con ella.

lunes, octubre 23, 2006

Nombrarte


Es dolor. El recuerdo de cómo pronunciaba tu nombre. Pausadamente, vocal a vocal desmenuzando cada sílaba.
Hacía de nombrarte una ceremonia interminable. Y llamaba tu atención, te silenciaba y te girabas sumisa. Como si al nombrarte en un código secreto te dijera algo más, o todo, algo íntimo. Con voz profunda rasgaba la vida.
Todavía se escuchan los ecos de su pronunciación en tu cabeza, como una espina contra el olvido. De dolor.

miércoles, octubre 18, 2006

Te invito a tomar unas tapas I


Borraré la saliva seca por el nerviosismo de tu boca a 10ºC con un amarillo Sameirás de Santo André de Camporredondo. Orgía de uvas. Pasará como una riada de frescura reparando las grietas de tus labios. Se abrirán las papilas gustativas, tras la base de tu lengua hacia tu nariz, tormenta de flores y frutas aromáticas, acidez enmascarada.
En ese momento depositaré un gajo de aguacate sobre una bolla de pan harinado. Tus huellas quedarán untadas en crudo aceite de arberquina catalana. Sobre él sin timideces Fleur de sel de Camargue. El aguacate da la falsa imagen de carne firme pero deja hundir los dientes hasta la misma base del pan, dónde brota el olivo. Tragas. Masticas. Sonreímos. Nos concentramos en las sensaciones.

Haremos entonces un quiebro de amargura, sobre una cuchara de porcelana blanca un molde de Torta del Casar ya sin consistencia, tampoco derretido. Prolongas las fases del parpadeo, risas sin sentido. Te acercas. Repites. Entonces me pedirás más vino y veremos que se ha vuelto más ligero, quiza escaso. Tomado por la ansiedad intento abrir el tinto con prisas mientras me conformo con otro trozo de pan.

Te ofrezco un pimiento de Herbón frito en ese momento, dejado caer sobre una hoja de jamón de encina. Es conocido que el pimiento hace sudar al jamón y este expulsa lo mejor de sus ácidos grasos, los sabrosos, esos que se pegan al paladar y a las neuronas. Tras el picor. Entonces pararíamos el mundo, no dejaríamos más que ese pimiento mordido, ese jamón desgarrado y la compañía, para seguir comiendo. El vino oscureció y se calentó con la gula, sus tierras se volvieron más de Pedrosa de Duero, un Gavilán olvidado durante tres años. Tras él tus labios parece que estuvieron besando picotas mordidas, no es momento ni para desearlos.

Continuará...

martes, octubre 17, 2006

Nos dolemos tanto



El dolor que nos hacemos ya no entiende de argumentos. Antes de hablar ya me estas respondiendo. Mientras me dices yo te contesto. Frío en las caras. Distancia. Momento, temblor amargo que tiñe lo real de ficción. Sin más créditos.

Me acerco impaciente y te hiero, mis besos desgarran tu piel. Lágrimas. Caminar en el sentido del desencuentro, mirar atrás es lanzar otro golpe, pronunciar tu nombre es clavar otra espada. Tu me dueles y yo te duelo.

Toda vida desaparece bajo la sombra de este horror. El horizonte se empaña con los recuerdos de la fricción, ese olor a cuero quemado, cuerpo helado contra cuerpo helado. Almas golpeadas. No damos llegado a un fondo dónde apoyar nuestros pies.

Y sin embargo hay algo tan fuerte que nos amarra, algo que el dolor no cortó, que llevamos desde siempre. Algo que tensa y no suelta. Algo que de un tirón te hace encontrar el suelo y otras veces te eleva más allá del cielo y es refugio y es anhelo.

martes, octubre 10, 2006

Dónde pisaste. PURDsxx 2004

Encapotado el tiempo, entretenido en cualquier lugar.
La mirada de un niño, la caricia de un perro, el verde y la lluvia sobre el rostro.
La pasión. Las lágrimas en los ojos enrojecidos de furia. Todo más cerca del reencuentro. La pasión (otra vez). Resplandor, hilo, perder de vista el cercano día a día. Con ellos, el mar se tragaba a sus hijos, jamas volvieron. Un trozo de pan tras un grolo de vino. Mientras el impulso nos lleva y una mezcla de sol sobre el cansancio y tras una ducha, me hace recordar y sobrevolar los destinos.

Intentando hacerte Mía

Llevo días en esto.
Miel reseca bordeando tus labios sellados. No la puedo humedecer. De espaldas estas tan lejos.
Busco tu mirada, giras el cuello, como si algo en otra parte llamara tu atención más que yo. Ya no me vuelves a mirar. Dirigiría tu cara hacia mí.
A tientas recorro tu brazo hasta tu mano extendida, me conformo con un dedo, con el roce fino, de paso, que se me hace eterno. Te vas y espero a que vuelvas, mantengo tu huella fresca, por un tiempo infinito, y no vuelves.

Entonces decido volver a ser yo el que sale en tu busca. Y tu sonrisa vuelve a ser tan fugaz, pero tan huella paciente en mi retina.
Frío que arrastra la sangre, sabor, inspiro heno mojado, dolor sonrisa.
Estoy detrás de ti, de tus letras, aguardando.
Todo lo que me das me parece más que suficiente.

domingo, octubre 01, 2006

Te traiciono sólo con recordarte


El encuentro en un viaje lejano, en una tierra perdida, entre extraños.
Creo que fue en el primer momento, todo se volvió tan sencillo, tu estabas tan cerca, tan transparente, tan íntima. Como si se hubiera tratado de un reencuentro. Como si no tuvieramos pasado. Te reconocí en una suma de trozos a los que ya había amado.
Sin nada me volví sinrazón, piel suave, un mar del que brotaban tus risas, dónde inconscientemente dejaste a la deriva tu cuerpo desnudo. Como si nuestros labios no hubieran besado antes, como si nuestros cuerpos no hubieran amado antes, así. Como si nadie nos hubiera herido. Nos reconocimos de pronto tan uno, tan desde siempre, que no hubo preguntas ni tan siquiera misterio. Nuestras manos se encontraban para explorarse y llevarse, una y otra vez.
Ya no se si fueron seis días, si algo partía la noche de la mañana, si nos alimentamos durante ese tiempo. ¿Qué vimos?. Lo que si recuerdo que nada fue disgusto.

Y llego la despedida y todo fue magia cuando tras esa mirada silenciosa sellamos un adiós con pisadas. Ni uno ni otro nos pedimos direcciones, ni teléfonos, ni ataduras, ni nos engañamos con posibles puntos de cruce en el horizonte. Ni siquiera hubo nada que nos pudiera convertir en pasado ni en recuerdo.
La verdadera magia fue que con elegante complicidad nos dejamos ir.

PURDsxx VII-2004. Otra noche. Desvarío


De miedos. Miedos que florecen por la falta de equilibrio, por las ondas que se cruzan en la travesía, por las dudas en el horizonte.
También por silencios, por largos silencios.
La nada. Un hondo vacío, flores del día marchitas, en medio de la sombra, en el callejón del musgo, con la espalda dolida.

El tiempo. Castigo, la redada de oriente. Destinos fusilados, intercambiados, guarecidos. Sonrisas que se hacen recuerdos, dentro de la fatiga. Buscando un sitio. En el desespero, en la furia. Zambullido en un estanque inalterado, sin ruidos, monótono atardecer sobre el que pasan las estaciones.

Malherido. De ti, de mí, de la llaga, carne viva insensible, lepra sin sangre. Malestar, delicadeza, ternura.
Desvarío. El pensar del duelo. El miedo camuflado en dolor. Las dudas, tremolo descaro y batalla.
Y dentro de este apagón, un recuerdo. El de volar, el romper las alas, el abrir la pelea. Resuenan al fondo aquellas campanas. Lo no franqueado. Remedio malherido. Vuelve el silencio a recordar que la noche es sobre todo súplica.
Llevame hacia atrás, hacia lo perdido. Tragos en descanso.
Todo tan cerca de los más íntimo.
Dónde sin necesidad de música crece el desvarío.

miércoles, septiembre 20, 2006

Por ónde andas? beleza....

Tropiezo con tus antiguas palabras, bañadas con música. Locura. Pelos erizados, rallante de cuentos, tras de ti. Éxtasis. Sigo corriendo, como perdido, jadeante búsqueda. El cansancio me impide recordar cuando te vi por primera vez. En tu voz rasgada, enferma, terminal. Te sigo persiguiendo. Rasgo toda letra, todo amanecer, te busco en cada foto, en cada sombra detrás de cada cuarto. En todo lo que se ilumina y en lo oscuro. Ahora te reconozco en esa melodía. Quiero chillar. Ahí estás!!!. Porqué ahora has decidido hacerme llorar?

Y apareces una y otra vez , cuantas veces me has golpeado ya, salto y te vas. No se si el momento vale la pérdida. Bebo porque no te tengo. Desgarro los papeles que envuelven las cajas, rompo las cuerdas. Ansia, mente, vacío. Lingotazo desparramado. Encuentro tu perfil, serio, tu nariz sobre tus cabellos. Otra veces te veo de espalda, tus piernas afiladas, un para qué. Forma casual, vientre roto. Y tú que me das, una sola dosis de instantes breves, de momentos, ... para mantener mi dependencia, mi enfermedad, mi padecer. Perros que ladran.
Poco a poco voy haciendo un puzzle de ti, Belleza. Algún día me acercaré tanto que te podré agarrar de tu cintura, y te apretaré contra mi pecho, con mis brazos. Y cerraré los ojos en un descanso, con una lágrima, para después seguir corriendo.

martes, septiembre 19, 2006

On the road, sonrisas


Quise notar tu presencia antes de verte, el viento sobre mi cara dibujando mis labios, humedeciendo mis ojos, sabia que estabas cerca. Caminaba deprisa las manos en los bolsillos, me sorprendí sonriendo. Sonrisas sin razón, cómplices de los que te cruzas.
Sonrisas gratuitas, de esas que se intercambian, que se pegan a la cara del que la mira, y este las rebota a otros, y asi se transmiten como una epidemia, montada en plena calle, en la mañana. Esas sonrisas que se acercan al saludo, que buscan un destino.

Entonces apareciste tú, y me pareciste tan bella. Tu gesto, tu mirada, el giro de tu cara partida por una cicatriz. Tu cuerpo menudo, tus prisas, tus piernas mojadas, tu aparecer en forma de despedida. ¿Porqué no te abracé?, porqué no te bese?, porqué dejamos pasar tanto tiempo, tantas olas, tantos momentos.
Porqué no le dimos sentido aquel día a aquellas sonrisas.

domingo, septiembre 17, 2006

Oscar Romero


"Aspire not to have more, but to be more."

"You say that you are Christian. If you are really Christian, please stop sending military aid to the military here, because they use it only to kill my people." (Letter to US President Jimmy Carter)

“I have often been threatened with death,”

Porque hay personas a los que la lucha no les ha dejado tiempo para dedicarse a la poesía

jueves, septiembre 14, 2006

Stokolm 2001


Una cita con algo de frío, frente al mar. A veces aún ni quedándose sólo uno es capaz de estar con-uno.
La sonrisa, el poder decidir, el otro , lo que quieren, la calma y el sosiego. Un sueño, algo que superar, danza, descanso y paz. En un banco, recuerdas?.
El silencio, reflexionar y plasmar lo que va demasiado revolucionado. Creo que cada día me parezco más a ti. La vida va demasiado despacio para nosotros, sabemos que si estamos quietos estamos retrocediendo, tú lo vives con ansiedad, yo con frustración.
Puedes caminar corriendo por las calles, o estar sentado, sin ruido. El amor, las gentes iguales, los vikingos, la música, el susurro del agua y la roca , el paso del bolígrafo.
El tiempo robado, la rendición, el foro en Port de la Selva.

Lo único que me produce terror es ver los sueños cumplidos.

miércoles, septiembre 13, 2006

PURDsxx < 2000 Todos bien

Realmente podría apearme, recorrer las tierras del destino en busca de nuevas fronteras. Pero estás tú. Forma perfecta, belleza, te quiero. Este querer no me oprime, me hace recobrar el sentido. Todo ha sido tan dulce. Quiero tragar saliva.
Ahora somos prisioneros de las formas ,antes lo fuimos de las leyes y los pecados, ahora lo somos del saber y del ser, siempre contestamos al ¿como estás?, con un todo está bien. Todos bien, esta es nuestra sociedad todos bien solos y bien angustiados. Pero hoy tú como tantas noches, me has buscado, me has encontrado y me has vuelto a liberar.

lunes, septiembre 11, 2006

Virtuosos en la simplicidad


Porque cuando abres la ventana, sólo ves el horizonte. Porque eres capaz de pasar las horas en la mar, con tu bote y no encuentras soledad ni silencio. Eres capaz de trabajar tus campos sin mirar pasar las horas, sin percatarse de que tu boca permanece cerrada, como tus oídos, y aún así sentirte acompañado y no enloquecer.
Envidio que seas capaz de escuchar tu respiración y tus latidos sin alarmarte. De que no necesites leer, oír música, llamar por teléfono, correr a la calle en busca gente, en esa hora que tu no entiendes como perdida.
Por eso me quiero despojar de todo lo que me han cargado en las espaldas, quiero estar en el metro sin periódicos ni libros, ni escuchar el MP3. Me gustaría prescindir de la esfera que aniquila mis momentos, de los objetivos, de las listas y de las fechas. Quiero como tú cerrar los ojos y no dejar entrar en mi pensamiento ninguna razón, si así no lo quiero, ninguna preocupación ni tan siquiera inquietud, ningún mar de palabras encadenadas desbocadas. No quiero saber de nada, yo quiero vivir como Tú.

viernes, septiembre 08, 2006

Ecos de entre agosto y septiembre



El sol del verano fue ganándonos el pulso a todos, ya nada ni nadie pudo hacerle frente a la hora maldita. Entonces llegaron tres días de lluvia, tres, escasos pero suficientes para hacer olvidar el sol de fundición, y todo milagrosamente renació. De la tierra rompieron miles de yemas de hierba, como un ejército de púas, finas y puntiagudas. Los árboles las contemplaban inmóviles como si no entendieran su tempo. Las uvas se fueron tiñendo de luto y los higos ganando y ganando peso en azúcar. Manzanas, peras y kiwis siguieron su camino.

Cielos inmensos e infinitos, anocheceres perfectos.


De repente, cerré los ojos, un día y una noche tuve que dejar de mirar, en realidad no se bien que pasó. Recuerdo ahora que noté un viento gélido en la oscuridad que no supe como interpretar. Entonces empezaron a llover hojas, por todos lados, primero los chopos, todo fue tupido. Las hojas que decidieron aferrarse a sus ramas perdieron la vida, el brillo, la textura, el sabor.

Es como si hubieran pasado toda una estación y todo fue en un día y una noche, a traición.

jueves, septiembre 07, 2006

En un momento de alegria, amor y sueños


Hoy bajo la lluvia, sobre la piedra como tantas veces encamino mis pasos en retirada,.... El agua sobre mi cara esta vez se confunde con alguna lágrima. La celeridad de la vida impide saborear los sentimientos que nos brinda, hay tantos resplandores, tantas cosas que nos deslumbran, que por momentos dejas de mirar en ti y en los tuyos. Siempre hacia un adelante que nadie nos aseguró si existe. PURDsxx <2000

Pero hoy algo me ha hecho parar, contigo. Deben de ser tus ojos humedecidos o tu media sonrisa. Debe de ser por la vida que has dado, por ese respirar acompasado, esa mirada ciega, ese no oír, todo ansias de instinto. Cuantas sonrisas hemos recibido. Me escondo junto a ti, tras él, con la timidez del desconocido. Escucho tu dolorido cuerpo tras la lucha, resentido. Puedo palpar lo que emites esas ondas nuevas, esa energía misteriosa con la que me atraes. Piel fría, ojos hinchados, labios mordidos. Llanto o quejido, hambre, gas, nuestra Suerte.

PURDsxx <2000


Un papel a mi alcance.
Un día desperté en una mujer un "No sé". "Adiós, no quiero saber nada de ti -respondí-". Todo lo que pienses en un día lluvioso de verano, no lo recordarás después de la tormenta.
Quiero saber qué misterio hay detrás tuya, en que juego me has metido que no dejo de estar contigo en Wellcome. Quiero saber quien eres, porque has tomado mi vida, porque me has traído aquí tan lejos de los otros hombres. Hemos crecido en esta vida que pintaban tan dura, tan cruel y yo la he encontrado tan tierna....
Dime con los surcos de tu cara como esta tu ánimo. Yo podré volver en cartas, poco a poco, en pequeñas dosis hasta que olvides mi torpeza, y otra vez nos veamos en Wellcome, Sudáfrica.

miércoles, septiembre 06, 2006

Partio otro cristal


Grito seguido del silencio más profundo. Ahh!. El eco del silencio me ha dejado sordo, inmóvil, frío. El entorno ha quedado hipnotizado, petrificado. He dejado de notar el viento en la cara, un filtro se ha interpuesto entre mi retina y la realidad, esa realidad a la que ahora se ha vuelto ajena, distante. Esa realidad que ha decidido cortar la piel, hacerla sangrar, volverla polvo.
Dolor sin nada más. El golpe fue rápido, huella que raja lo íntimo, mar que ahoga. Viento gélido, me incomoda este frío. Ahh!. Bochorno que hace sudar el mismísimo "adentro" que hace más pesado el oxígeno que corta la inspiración, que la vuelve suspiro.
Al más golpeado, al injustamente más golpeado. Un día cruzada la larga ciénaga de los días amargos, asomará otra sonrisa y empezarás a escuchar música en el horizonte, entonces los rayos del sol volverán para tocarte la cicatrices. Notarás la brisa en tus pestañas y volverás a reír pero para siempre te acompañarán las aristas del cristal roto en el bolsillo.

viernes, septiembre 01, 2006

Letras de Anhoranza al Mediterráneo. II-2000


Porque en esta vida nunca sabemos si nos volveremos a ver, porque en esta vida muchas veces dejamos cosas importantes por decir.
Acogida, mediodía. Descanso. ¿Cómo hacéis sin la lluvia para poder conoceros?, ¿Cómo prescindes de los grises para darle a la vida lágrimas? ¿Cómo puedes mirar al sol, blanco sobre azul y encontrar la morriña del hombre?
Aprendiste a bailar, a reír, a abrazar y a besar al borde de un mar sin olas. Desnudo. ¿Cómo tu mente pude ser tan inquieta si aquí no tenéis viento?. Prejuicios rotos.
El licor no se despega de mis palabras ni de mis labios. No hay ruido, sentado frente a mí. Una seda, un diamante, una patata o un trozo de tierra en la mano.
Hay personas que no se pueden ocultar, por grandes que parezcan por deprisa que pasen. Conocer la verdad de las cosas no nos impedirá tener un animo feliz para cambiarlas. Son muchos los que viven como tú coherentemente, los transparentes tenéis la facilidad de empatizar bien con la gente. No es fácil hoy en esta caldera de la que somos prisioneros y cómplices.
De ti he aprendido a abrir puertas o atravesarlas cuando están abiertas, cómo se vive en una casa sin paredes, sin techos ni espadas. No dejes de escuchar la música. Regadío, hielo duro, frío, blanco y cuchillo. Sangre.
A ti un amigo con sonrisas, besos, admiración y compromiso.
Hay palabras que suenan serias pero que terminan en la complicidad de una carcajada silenciosa.

PURDsxx II-2000


Tras la puerta, con el sabor del brandy que no se despega de mis labios. Mañana que no aparece. Olvido. Lentitud. La noche está prohibida a mis caricias, el dulce parpadeando con mi lengua, despertando el ser.
Acogida, mediodía. Descanso, furia del tiempo que pasa por la vida de uno. Otra forma de medir las energías de la sinrazón, el número de palabras que de ti brotan. ¿Y si no eres capaz de hilar palabras?. Y si cuando apagamos la música, despides a las compañías y el segundero de un reloj se vuelve en tú único compañero. Entonces te regalas sonrisas sin sentido esas mismas que por el día olvidas y niegas. Hay sensaciones que terminan con lo que perdura una copa en la noche otras te hacen vivir una orgía.
Si no te escribo no sabré lo que siento por ti, entre tanto ruido, arrastrado por el vértigo. Porque al final todo lo que escribo cobra sentido en ti cuando digo que te quiero.

El sentido de las palabras

Robo la música para hacerla nuestra una música escrita por otro, para otra, quizás sin todo el sentido que nosotros le damos. De la misma forma haz tuyas mis palabras, déjalas fondear en el mar de tu sentimiento. Una y otra vez te descubro cuando describo a la lluvia o a la pena o a la alegría. Te encuentro en todos mis renglones, continuas referencias que me hacen revivir el amor que por ti siento, ese amor que no sabe quedar encerrado en nuestras miradas, en nuestros cuerpos, ese amor que se cuela por todas las rendijas para empaparlo todo como si fueran lágrimas de tinte. Ese amor no nos pertenece ni termina en ti, es un continuo que se va uniendo como el mercurio, con un magnetismo que mueve todo. Primaveras, esperanza, tormenta de paso, nube gris. Amanecer. Sólo el dolor de la pérdidas produce un sentimiento más intenso. Al releer estas palabras las entiendo de forma diferente, como tú.

jueves, agosto 31, 2006

Reencuentros desde la noche oscura *

Desconozco en que se diferencia esta noche de otra previa, de otra cualquiera. ¿Porque determinadas noches se hacen especiales? Hay noches que nos persiguen en el tiempo y nos recuperan, nos rearman una y otra vez como en un ciclo sin fin. En ocasiones nos descubren entretenido, otras distraido, otras se olvidan de venir a visitarnos. Arrimándose al balcón de esas noches uno puede palpar la esencia de la belleza depositada por Alguien entre letras, notas, colores o simplemente en sensaciones. Traspasándola uno puede tocar los sentimientos, dejarse gobernar por la sinrazón, embriagándose en un mar de enamoramiento. Estas noches nos colocan ante el verdadero Yo, el Yo de siempre, el que desaparece por la inercia de la vida, el que duerme protegido del cambio de los años y los lugares. Nos hacen hablar con palabras bellas, hacen brotar sonrisas, apagan miedos y temores. Desde el silencio de la música en esa oscura complicidad de toda ausencia, estas horas de gozo que nacen para ser compartidas con todo lo amado.

Mirada rasgada

Latidos intercostales, intensos, de escapada, que se han convertido en un fluir de sonrisas, de risas hasta llegar a la carcajada. Sin más entendimiento que la mirada, que el gesto, que la distancia. Dispuestos a compartir una vida de forma irremediable, con ella. Silencio, gemido, observando lo que pasa a su alrededor con la atención de quien tiene que dar parte de ello, como si lo quisiera hacerlo de ella todo. Sin llanto, noches de sueño plácido ininterrumpido. Sólo encuentro paz remota tras esos ojos rasgados, blancos y negros, que venden caras sus lágrimas dolorosas, inmensas, cuando se azotan humedecen mi corazón de pena. Entre el verde de un verano soleado.

miércoles, agosto 30, 2006

El paso de los días -

Pasan los días sobre nosotros sin que los contemplemos, sin que los disfrutemos. Sólo los vemos un día, un momento, cuando tenemos los ojos abiertos, por un instante, que luego revivimos, lloramos o reímos, contamos, recordamos para finalmente olvidar. Quisiera compartir aquí el paso de nuestros días, en el trabajo continuo de buscar en ellos la belleza que esconden, de alargar y plasmar los momentos que nos brindan.